CARLOS FUENTES
Felipe Montero, un joven historiador, solicita empleo a doña Consuelo, viuda del general Llorente, para ordenar y terminar de redactar las memorias del difunto marido. A cambio, Felipe deberá vivir en la casa, un lugar misterioso que permanece en las tinieblas para evitar el recuerdo del general. Pronto conocerá a Aura, la sobrina de doña Consuelo, en una atmósfera inquietante parecida a la de un jardín maligno. En un estado de absoluta embriaguez, Felipe descubrirá que la dependencia de Aura hacia la anciana va más allá de lo imaginable. La artista Alejandra Acosta ofrece unos collages que exploran y profundizan en lo tenebroso de una de las muestras más notables de la narrativa mexicana.